¿Los gatos temen al agua? ¿Los gatos se bañan? Estas y otras preguntas son las que constantemente nos formulamos las personas que tenemos un gato a nuestro cargo. Dado que el miedo de los gatos al agua -aparentemente irracional- es una de las dudas más misteriosas que rondan a los felinos, vamos a tratar de comprender por qué a los gatos no les gusta el agua y abordar este mito tan curioso.
¿Por qué los gatos tienen miedo al agua?
Si echamos la vista atrás y analizamos los orígenes de los gatos, encontramos que los primeros felinos (los gatos salvajes de África, Europa y el Desierto Chino) aparecieron en el desierto. Sabiendo esto, no es de extrañar que si desde sus orígenes apenas han tenido contacto con el agua, los gatos domésticos no han evolucionado para relacionarse con este medio.
Sin embargo, tampoco podemos generalizar. Cuando afirmamos que los gatos miedosos al agua son la tónica general, estamos cayendo en un error. Curiosamente, existen varias razas de gato a las que les gusta el agua ya sea por sus orígenes (bosques húmedos, zonas tropicales, orillas de lagos) o las costumbres propias de su raza (por ejemplo, los gatos pescadores). Estos son algunos de los gatos que no tienen fobia al agua. ¿Los conocías?
- Gato Angora Turco: El Angora, gato nacional de Turquía, es un fanático del agua.
- Gato Bengalí: El gato de Bengala procede de la jungla asiática, un lugar muy húmedo.
- Gato Van Turco: También conocido como "gato nadador turco", el Van Turco es originario del lago Van en el este de Turquía.
- Gato Bosque de Noruega: Dado que el Bosque de Noruega procede de tierras escandinavas, cuenta con un tupido pelaje resistente al agua que le hace no temer a este medio.
