Desde hace décadas, los gatos han sido señalados como los animales que transmiten la toxoplasmosis. De hecho, son muchas las personas que a día de hoy tienen miedo al contagio de esta enfermedad y evitan el contacto directo con los gatos. Sin embargo, antes de lanzar esta afirmación, deberíamos pararnos a analizar los mitos y verdades sobre la toxoplasmosis de los gatos, pues en muchos casos podemos encontrar información muy confusa al respecto. Así pues, ¿qué hay de cierto sobre la toxoplasmosis en gatos? Presta especial atención.
¿Qué es cierto y qué no sobre la toxoplasmosis de los gatos?
La toxoplasmosis es una enfermedad grave que no podemos tomar a la ligera, pero culpar a los felinos sin tener toda la información al respecto, no es algo que podemos hacer.
1. Todos los gatos transmiten la toxoplasmosis
Esta afirmación es totalmente falsa. En primer lugar, hay que saber que la toxoplasmosis es una enfermedad infecciosa que está provocada por el parásito Toxoplasma Gondii. Se trata de una enfermedad que transmiten los animales a los humanos, pero hay que decir que los gatos no son la única vía de contagio de la toxoplasmosis, ya que otros muchos animales también pueden transmitirla.
Además de los animales, también podemos contraer la toxoplasmosis si comemos vegetales y frutas mal lavados. Y también tienen altas posibilidades de contagio todas aquellas personas que trabajan en el campo y que tocan la tierra sin la debida protección de unos guantes.
2. La toxoplasmosis no se transmite entre humanos
Aunque el contagio de la toxoplasmosis entre humanos no es posible, debido a que se trata de una enfermedad de tipo zoonosis, no hay que olvidar que las mujeres embarazadas sí que pueden pasarle al enfermedad a sus hijos mientras éstos están en su vientre.
3. Los gatos son portadores de la toxoplasmosis
Esto no es del todo cierto, porque aunque es verdad que los gatos sí pueden contraer la enfermedad, esto no significa que sean portadores de ella. El contagio de la toxoplasmosis en gatos se da, principalmente, cuando éstos se alimentan de la carne de otros animales que tienen el parásito.
Por ello, no podemos afirmar con rotundidad que los gatos son portadores de la toxoplasmosis, sino que se contagian de ella cuando comen carne de otros animales enfermos. Cuando el gato come esta carne infectada, el parásito pasa directamente a las heces del gato, y aquí es, precisamente, cuando los humanos debemos llevar cuidado para no contagiarnos.
4. Los gatos que sólo comen pienso pueden contagiarse del parásito
Esta afirmación es otro de los mitos sobre los gatos que debes conocer, ya que como hemos explicado en el punto anterior, cuando un gato se alimenta de carne cruda de una presa u otro animal muerto que porta la toxoplasmosis, es cuando existen posibilidades reales de que se contagie.
Sin embargo, los gatos domésticos que sólo se alimentan del pienso o la comida húmeda que les damos en casa no pueden contraer la enfermedad, a menos que en un descuido coman carne cruda infectada por el Toxoplasma Gondii.
5. Las embarazadas no pueden tener gatos
¿Se puede tener gato estando embarazada? Por supuesto. Aunque bien es cierto que si una mujer embarazada contrae la toxoplasmosis puede transmitirle a enfermedad a su bebé a través de la placenta. Hay que aclarar, sin embargo, que el contagio en caso de que su gato tuviera la toxoplasmosis, sólo podría darle si la futura mamá toca las heces del gato sin protección en las manos.
Por ello, tener gato en casa durante el embarazo no está prohibido ni desaconsejado, ni mucho menos. Simplemente, la mujer embarazada deberá llevar especial cuidado cuando limpie las heces de la caja de arena de su mascota, siendo conveniente el uso de unos buenos guantes cuando vaya a estar en contacto con las heces del animal.
