Distintas enfermedades, un traumatismo, una alimentación deficiente, un glaucoma que se desarrolla debido a la hipertensión ocular… las principales causas que provocan la ceguera en los gatos tienen orígenes diversos y, al hablar de ellas hay que distinguir entre las que hacen que el animal pierda la visión de manera temporal y las que desembocan en ceguera definitiva. El gato no puede comunicarse contigo y decirte que está perdiendo visión, por eso es importante saber si tu gato no ve bien, para lo que hay que estar atentos a su comportamiento.
Siempre que sospeches que tu gato no ve convenientemente, acude al veterinario porque muchas de las enfermedades que causas ceguera en los gatos, si se tratan a tiempo, tienen solución y pueden corregirse.
Posibles causas de ceguera en gatos
Las causas más comunes por las que un gato puede perder la vista pueden clasificarse en tres grupos: enfermedades, traumatismos y afecciones oculares, eso sin olvidar las patologías hereditarias.
- Causas de ceguera temporal. Un fuerte golpe en la zona del ojo o un arañazo o herida, fruto de una pelea con otro gato, siempre han de tratarse para evitar malas consecuencias. Según la gravedad del traumatismo, hasta que se recupere, tu gato puede que no vea durante unos días o semanas. Otra posibilidad de ceguera repentina y transitoria es que sufra una dilatación excesiva de la pupila por algún motivo. Es lo que se conoce como midriasis y la provoca por ejemplo, la hipertensión ocular. Una fuerte conjuntivitis, cualquier infección, incluso una uveítis, inflamación de la parte interna del ojo, podrían hacer que el gato perdiese la visión para, con el adecuado tratamiento, recuperarla pasado un tiempo.
- Ceguera en los gatos viejos. Igual que nosotros, a medida que pasan los años es bastante normal perder visión y lo mismo les ocurre a nuestros felinos. Por ello, es aconsejable preocuparnos por los cuidados del gato a lo largo de su vida, y que llegue a su etapa de vejez con la máxima salud posible.
Las cataratas son la causa más común de ceguera entre los gatos mayores y también la atrofia progresiva de la retina, una enfermedad hereditaria que se manifiesta en edades avanzadas.
- Ceguera a causa de la anestesia. Cuando es necesario realizar una intervención quirúrgica, el gato puede sufrir reacciones adversas frente a la anestesia. Hay que dejar claro que esto ocurre en contadas ocasiones pero, siempre que se hable de anestesia, el riesgo existe. Una de las reacciones que pueden suceder es la pérdida de visión que, en la mayoría de los casos, es temporal. Para evitarlo, un completo pre operatorio, que destacarte posibles reacciones adversas, es la mejor medida preventiva.
