¿Cómo adoptar a un gato de la calle?

Quiero adoptar un gato callejero. ¿Qué puedo hacer?

Para alguien que ame a los animales es difícil resistirse al impulso de recoger a un gato de la calle. Si apuestas por la adopción, debes tener muy clara tu decisión. Tu nuevo amigo necesitará atención y cuidados, probablemente, durante muchos años. Este debe ser siempre un acto responsable. Así pues, ¿cómo adoptar a un gato de la calle? ¿Qué precauciones debes tomar a la hora de adoptar a un gato callejero? Presta especial atención.

Olesya Kuznetsova || Shutterstock

Olesya Kuznetsova || Shutterstock

Consejos para adoptar a un gato callejero

Para adoptar a un gato de la calle, lo primero que debes hacer es extremar la precaución a la hora de agarrarlo. Dado que el felino puede estar herido y/o asustado, debes acercarte despacio, hablándole con suavidad para demostrarle tus buenas intenciones. Observa su reacción y no te acerques más de la cuenta hasta que no lo veas totalmente tranquilo. Si el gato se muestra receptivo, llevarlo a casa es una decisión que te dará muchas satisfacciones.



En cuanto puedas, acude al veterinario para que le hagan una revisión. Puede que el gato lleve microchip y simplemente se haya perdido. Si definitivamente vas a adoptar a un gatito callejero, el veterinario te confirmará su estado de salud y algunos datos importantes: edad aproximada del animal, si tiene parásitos que hay que eliminar, si padece alguna de las enfermedades mas comunes de los gatos o si es gata y resulta que te estás llevado a “más de uno”.

Tras estos preliminares, llega el momento de iniciar el proceso de adaptación de un gato adoptado. Dale su tiempo. Tu nuevo gato necesita conocer el entorno y, poco a poco, confiar en ti (especialmente en gatos mayores). Algunas pautas a seguir para que todo vaya sobre ruedas son:

  1. Deja que “cotillee” en libertad. Los gatos son muy curiosos y en las primeras horas querrá descubrir dónde está.
  2. Seguramente elegirá un sitio donde “esconderse” y sentirse seguro. Aunque no sea el sitio donde quieras que esté, déjale un par de días y ponle ahí su comida, su agua y su arenero.
  3. Pasados unos días, prueba a sacar sus cosas y a colocarlas en su ubicación definitiva. Verás como acaba yendo y abandonando su “escondite”.
  4. Háblale, intenta acariciarle, jugar con él... se trata de que os vayáis conociendo. Para ello te será muy útil nuestra guía para entender el comportamiento de tu gato. ¡Todo refuerzo es positivo!
  5. Comprarle algunos juguetes y un “rascador” para que se afile sus uñas sin destrozarte los muebles, es también una buena idea.
  • ¿Te ha servido de ayuda?
  • No

Autor

Mariola Báez Verdú

Licenciada en Ciencias de la Información con más de 10 años de experiencia en la redacción de contenidos digitales y especializada en la elaboración de artículos y reportajes relacionados con el cuidado de animales domésticos.


7 artículos