La decisión de poner fin a la vida de tu mejor amigo, en este caso, de tu mascota que te ha acompañado durante tantos años, es un proceso largo y de difícil asimilación para cualquiera. Sin embargo, en muchas ocasiones, y especialmente cuando nuestro gato es víctima de una enfermedad irreversible que le provoca sufrimiento, no nos queda más remedio que tomar esta drástica decisión al no encontrar otras soluciones alternativas a la eutanasia en gatos. Sigue leyendo y descubre todo lo que necesitas saber sobre este paso tan sumamente difícil.
El temido momento: ¿Cómo saber cuándo sacrificar a tu gato?
En términos generales, la eutanasia es un proceso que suele ser recomendado por un veterinario cuando diagnostica una enfermedad muy grave e irreversible a nuestra mascota. Especialmente, este proceso de muerte inducida, suele ser preescrito por el veterinario cuando observa que el animal presenta un estado de salud grave y mucho dolor y malestar. Sin embargo, la última palabra a la hora de decidir sacrificar a un gato, la tienen sus propios dueños. Por ello, se trata de una decisión absolutamente personal y meditada en la que nadie debería interferir.
En muchos casos, al convivir con un gato que tiene alguna enfermedad muy grave como un cáncer o el virus de la leucemia felina, por ejemplo, nos damos cuenta nosotros mismos de que lo más conveniente es evitarle sufrimiento a nuestra mascota, y ofrecerle el descanso que merece.
El consejo de un veterinario profesional y de nuestros familiares y amigos puede orientarnos a tomar la decisión. Sin embargo, al final debe ser el dueño de la mascota el que debe tener totalmente clara la decisión de sacrificarlo o no.
En muchas ocasiones, los seres humanos caemos en la tentación de retrasar el momento de sacrificar a nuestras mascotas, por el simple hecho de retrasar nuestro intenso dolor ante esta pérdida. Sin embargo, hay que tener en cuenta que alargar la vida de nuestro gato, si éste está sufriendo, puede ser una decisión que lleguemos a lamentar en el futuro.
¿Mi gato sufrirá durante la eutanasia?
La eutanasia que se practica en gatos se lleva a cabo en centros veterinarios profesionales en donde les ponen una inyección intravenosa con diferentes fármacos que le inducen la muerte en pocos segundos. En ningún caso debes sacrificar a tu gato en casa, puesto que no contarías con todo lo necesario y el proceso podría complicarse. La visita al veterinario es primordial.
Pero... ¿Los gatos sufren durante el procedimiento de la eutanasia? Hay que destacar que este proceso no es doloroso para el animal, sino más bien al contrario, tras recibir la inyección, nuestra mascota se sumergirá en lo que se conoce como 'la muerte dulce', pues su efecto se asemeja al de estar durmiendo.
¿Cómo se eutanasia a un gato?
Los centros veterinarios suelen disponer de una preparación especial para administrarle a los animales que van a recibir la eutanasia. Este tipo de medicación se administra a través de vía intravenosa y contiene algunos principios activos como Embutramida, Mebezonio y Tetracaína Clorhidrato.
El veterinario se la pinchará poco a poco, muy despacio, pero de una sola vez. El proceso completo de la eutanasia dura entre 10 y 20 segundos, y una vez que ha finalizado, será el veterinario quien compruebe que el corazón de nuestra mascota ha dejado de latir. Una vez que el animal ha fallecido, desde el mismo centro veterinario en donde le han practicado la eutanasia, te comentarán las diferentes opciones que tienes para despedir a tu mascota de la mejor manera posible.
¿Dónde puedo sacrificar a mi gato?
Si has tomado la decisión de sacrificar a tu gato debes acudir a un centro veterinario. Muchas de estas clínicas están abiertas las 24 horas del día y tienen veterinarios de urgencia por si en un momento dado, se agrava la salud de nuestra mascota y es preciso sacrificarlo en un día festivo o durante la franja nocturna del día.
