Muchos de los problemas de salud que pueden padecer los gatos encuentran prevención a través de una dieta correctamente balanceada y equilibrada. A la hora de alimentar a un gato, es necesario tener en cuenta una serie de claves que nos asegurarán que estamos proporcionándole la dieta adecuada que cubrirá todas sus necesidades nutricionales. Todos los detalles sobre la dieta balanceada para gatos, a continuación.
¿Cómo es una alimentación balanceada para gatos?
Los gatos, al igual que cualquier otro animal, deben contar con un alimento básico en su dieta diaria: el pienso. En este caso, es necesario comprar un pienso específico para gatos, que podremos encontrar en cualquier tienda de mascotas o supermercado.
Actualmente, muchas marcas fabrican piensos específicos para cubrir las necesidades de cada gato. Por ejemplo, podemos adquirir piensos bajos en calorías, que ayudan al gato a evitar el sobrepeso, y por lo tanto, previenen también enfermedades graves como la diabetes.
Asimismo, existen piensos específicos para gatos con problemas renales o urinarios. En este caso, los piensos suelen estar formulados con un bajo contenido en sal, y con otros nutrientes necesarios para elevar el pH de la orina de los gatos que sufren alguna de estas enfermedades.
Alternar pienso seco con comida húmeda
Muchos veterinarios reconocen que la mejor dieta para gatos, es aquella que alterna el pienso seco con comida húmeda, es decir, con alimentos en lata.
Y es que, el alimento húmedo proporciona a nuestra mascota el nivel óptimo de hidratación que necesita en cada momento, y le evita algunas enfermedades como la aparición de cristales en la orina.
Hay que tener en cuenta que los gatos no son muy dados a beber agua, por lo que suministrarle un alimento húmedo en lata a nuestra mascota, le ayudará a mantener un correcto y equilibrado nivel de hidratación.
Proporcionarle agua siempre
El agua es esencial en la dieta de cualquier ser vivo y, como no podía ser de otra manera, también en la alimentación de los gatos. Sin embargo, si eres dueño de uno de estos felinos habrás observado que tu mascota no tiene por costumbre beber demasiada agua a lo largo del día.
Y es que, precisamente porque beben muy poca agua, los gatos son propensos a padecer enfermedades renales y del tracto urinario (como piedras o infecciones).
Procura que, junto a su recipiente de comida, tu gato cuente siempre con otro recipiente con agua limpia y fresca. Para animarle a beber, intenta cambiarle el agua varias veces al día, con el objetivo de que le resulte más apetecible.
Pequeñas raciones de alimento
Los gatos necesitan comer en pequeñas cantidades, y no son amigos de los grandes atracones. Hay que tener en cuenta que, la naturaleza de estos felinos es, precisamente, la de cazar animales e ir comiéndoselos poco a poco, y según los van cazando.
Por este motivo, y con el objetivo de no saltarse sus costumbres y su instinto natural, puedes dejar un pequeño recipiente de comida para que tu gato se acerque cuando desee comer. Eso sí, has de tener en cuenta que esto solo puedes hacerlo si tu gato no padece problemas de diabetes, obesidad o sobrepeso pues, en este caso, deberás administrarle tu mismo las raciones de comida diarias, según las cantidades que te indique el veterinario.
La taurina es esencial
Los gatos precisan el aminoácido taurina para evitar muchas enfermedades y para mantener un correcto estado de salud. Actualmente, los piensos para gatos suelen ir enriquecidos con taurina, así como las latas de alimento húmedo.
No obstante, si crees que las cantidades de taurina que contienen estos alimentos no son suficientes para tu mascota, siempre puedes recurrir a suplementar su dieta con otros alimentos ricos en taurina, como la carne poco cocinada y especialmente, los productos de casquería.
