¿Un gato puede llorar?
Nadie que los conozca puede poner en duda que los gatos son capaces de expresar sus sentimientos. Se comunican con nosotros a través de los sonidos que emiten, maullidos, ronroneos, bufidos… y también por medio de su lenguaje corporal, pero el llanto similar al humano no se da igual en los gatos.
¿Un gato llora con lágrimas?
Entendemos que llorar implica derramar lágrimas porque algo, físico o anímico, nos hace sufrir. Aunque hay quien opina lo contrario, veterinarios y expertos coinciden en que los gatos no expresan su tristeza llorando.
De sus ojos salen “lágrimas” normalmente causadas por un problema ocular. El excesivo lagrimeo puede deberse a una mota de polvo, arena o cualquier otra cosa que les molesta y les provoca una irritación. De esta manera, el gato consigue eliminarla. También puede tratarse de una pequeña infección, una obstrucción del lagrimal o una conjuntivitis que comienza.
Si detectas que tu gato lagrimea de manera constante y/o con demasiada frecuencia, además de limpiar los ojos de tu gato con cuidado, la consulta al veterinario es siempre recomendable.
¿Los gatos lloran cuando se quedan solos?
Por su parte, los maullidos lastimeros que resultan conmovedores sí expresan que algo le ocurre al animal y podrían considerarse una especie de llanto. Puede que lo haga porque ha estado unos días solo en casa y manifiesta su descontento por el “abandono”, puede indicar que algo le duele o simplemente que tiene hambre o frío. También es normal escucharle así de apenado en épocas de celo en las que no puede salir de casa para ver a una linda gatita.
Como conclusión podemos decir que, por supuesto, los gatos pueden llegar a sentirse infelices y hasta deprimidos, pero generalmente expresan su estado de ánimo, rehuyendo la compañía humana, mostrándose apáticos y desganados y pasando mucho tiempo escondidos. Llorar, como nosotros, en principio, no lo hacen.