Gatos callejeros
Generalmente los gatos callejeros se agrupan en "colonias". Algunos vecinos, se solidarizan con los gatos dándoles comida. Es aconsejable no dar comida cruda o sobras de comida. Esto generará quejas de otros vecinos por la suciedad y además no supone una comida sana para los gatos. A pesar de seguir estas indicaciones, siempre habrá otros vecinos que los denunciaran por considerar que así se agravan las condiciones de salubridad del barrio, ya que al multiplicarse sin parar constituyen un foco de enfermedades. ¡La polémica está servida!
Pero acabar con las colonias de gatos no es una tarea fácil. Normalmente cuando se elimina una colonia, siempre acaba por ubicarse otra en la misma zona, en un corto periodo de tiempo.
A pesar de esto existen muchas asociaciones que se encargan de controlarlas, ocupándose de la esterilización y de la alimentación de estos felinos. Sería necesario un plan que involucrase la educación ciudadana y la acción legislativa.
Si conoces zonas con condiciones insalubres, es mejor llamar a la protectora de animales de tu ciudad. Ellos sabrán qué hacer.
Los gatos romanos, patrimonio biocultural
En Roma parece que las colonias de gatos no suponen ningún problema. De hecho los 120.000 gatos callejeros que se calcula que existen han sido declarados "Patrimonio Biocultural". Y es que los felinos romanos son un bien que los italianos deben conservar. De hecho estas colonias se pasean tranquilamente por el casco antiguo de Roma, constituyendo un elemento más del paisaje romano.