Aunque los gatos son animales muy tranquilos que, aparentemente, no sufren mucho con las circunstancias que rodean a su entorno, estas mascotas pueden llegar a deprimirse en ciertas épocas del año y ante determinados cambios que puedan ocurrir en su rutina habitual. La depresión en los gatos es una enfermedad difícil de detectar, y para determinar si nuestra mascota está deprimida hemos de estar alerta a los diferentes síntomas que éste nos pueda mostrar. Si tu gato está deprimido... ¿Qué puedes hacer para ayudarlo?
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Síntomas de depresión en tu gato
¿Sientes que tu gato ya no te quiere como antes? Los cambios de actitud de este tipo suelen ser una de las primeras señales que nos indique que nuestro gato está atravesando una depresión. En este sentido, los cambios de actitud más frecuentes suelen ser los siguientes:
- Falta de apetito
- Pérdida de las ganas de jugar
- Dormir muchas horas seguidas a lo largo del día
Una vez que hemos detectado que nuestro gato sufre depresión, el siguiente paso es averiguar la causa que ha desencadenado la enfermedad. En la mayoría de ocasiones, las causas más frecuentes de depresión en los gatos suelen ser las mudanzas o cambios permanentes de residencia, los viajes, la llegada de un nuevo miembro a la familia, la falta de espacio, la falta de estímulos en el entorno que le rodea, una carencia de vitaminas o, la alteración de sus patrones de sueño, entre otras muchas.
Cómo curar la depresión de mi gato
Cuando empecemos a notar cambios importantes en el comportamiento del gato, lo primero que hemos de hacer es llevarlo al veterinario para que descarte la presencia de alguna otra enfermedad, o bien, para que le prescriba un tratamiento adecuado para curar la depresión.
Sin embargo, y además del tratamiento que el veterinario pueda recomendarle, existen otros muchos gestos que tú, como dueño, puedes hacer para ayudar a tu mascota a curarse de la depresión.
Los expertos aseguran que una de las principales claves para que un gato supere la depresión, es que éste se sienta querido por sus dueños y por todos los miembros de la familia que conviven con él en el mismo hogar. En este sentido, un gato con depresión necesita que su dueño esté más pendiente de él, que le dé más mimos, le acaricie más, y que juegue más veces al día con su mascota.
Sin embargo, si tu actividad diaria no te permite pasar muchas horas en casa con tu mascota, es recomendable que ésta siempre cuente con muchos juguetes a su alcance con los que pueda distraerse, incluso, que le instales un rascador para que tu mascota haga algo de ejercicio y combata así el aburrimiento.
Tratamiento contra la depresión en gatos
Algunos gatos que sufren depresión pueden llegar a tener dificultades para superarla pese a que sus dueños pongan todos los medios a su alcance para que se cure. En este sentido, si has seguido todos estos consejos para que tu macota mejore, pero no has notado ningún cambio transcurridos unos días, la mejor opción será llevarlo al veterinario.
En los casos más graves de depresión, algunos veterinarios recomiendan un tratamiento a base de homeopatía, o incluso, alguna variante de antidepresivo destinado exclusivamente a uso animal.
Remedios para la depresión de los gatos
El mejor remedio para evitar que tu gato sufra una depresión, es mostrarle toda tu atención, apoyo y cariño en los momentos que pases en casa con él. ¿Puedes dejar solo en casa a tu gato? Por supuesto, pero has de tener en cuenta que si tu gato pasa muchas horas solo, es más probable que pueda padecer depresión debido al sentimiento de soledad que esta situación le provoca.
Dedica, al menos, 30 minutos diarios a jugar con tu mascota, hazle sentir útil en casa, muéstrale cariño, háblale más a menudo, y mantenlo siempre estimulado a través del juego y del ejercicio físico.
