Si últimamente has notado que tu gato bebé está muy cansado, tiene fiebre, conjuntivitis, y expulsa secreciones por la nariz, es probable que haya contraído la gripe felina. ¿Pero cómo es la gripe en los gatos recién nacidos? ¿Cómo podemos cuidar a un gatito enfermo de gripe? Descúbrelo con nosotros.
Las infecciones que afectan al tracto respiratorio de los gatos son conocidas como gripe felina. Se trata de una enfermedad que ha de ser curada a tiempo, ya que en gatos recién nacidos puede ser mortal si aparecen ciertas complicaciones. La gripe felina es una de las enfermedades más comunes de los gatos desde que son cachorros hasta la edad adulta. Este virus se manifiesta principalmente con los ojos llorosos, con secreciones o goteo nasal, y con algunos estornudos.
Si no hay complicaciones infecciosas, la gripe felina es una enfermedad que no tiene tratamiento, y que suele remitir una vez que ha transcurrido una semana. Eso sí, hay que indicar que se trata de una enfermedad altamente contagiosa, que se pega con facilidad a otros gatos.
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¿Cómo aliviar los síntomas de la gripe felina en tu gato bebé?
Aunque no se puede curar con medicamentos, si tienes un gato recién nacido que se ha contagiado de gripe felina, puedes ayudarle a aliviar los síntomas siguiendo unos sencillos consejos. Aunque durante los días que dura el virus es más que probable que tu gato no quiera comer como antes, has de animarlo a que coma para que se pueda sentir más fuerte y combatir así mejor la enfermedad.
Si quieres estimular su apetito, la mejor opción es ofrecerle comidas templadas, o bien, añadir agua caliente al pienso para gatos que come habitualmente para después prepararle una especie de pasta que se comerá más fácilmente que las bolas de pienso secas.
Es importante, sobre todo si tiene fiebre felina, que ofrezcas a tu gato alimentos ricos en proteínas para que pueda sentirse más fuerte. Puedes ofrecerle una pechuga de pollo, unos huevos revueltos con su pienso, o un trozo de queso fundido con las bolas de pienso.
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¿Cómo cuidar a un gatito con gripe?
Los gatos que contraen la gripe felina suelen expulsar frecuentes secreciones por la nariz y los ojos por ello, trata de limpiarle de forma frecuente con un pañuelo, toallita o gasa húmeda, para evitar que pueda coger una conjuntivitis o que las secreciones de la nariz se conviertan en molestas costras.
La solución salina para los ojos de los gatitos con gripe felina es también un remedio muy eficaz para combatir las legañas y las secreciones que se forman en los ojos de nuestra pequeña mascota.
Al igual que ocurre con los humanos cuando cogemos un resfriado, es conveniente humedecer el ambiente para ayudar a tu gato recién nacido a respirar mejor. Esto se puede conseguir mediante un aparato humidificador, o metiendo a tu mascota en el baño con la puerta cerrada, y abrir el grifo del agua caliente para humedecer la estancia.
Si quieres evitar que tu gato sea víctima de gripe felina en el futuro, la mejor opción es vacunarlo cada año contra esta enfermedad. Aunque esta vacuna no exime al cien por cien de coger la gripe, con ciertas vacunas para cachorros de gato los síntomas serán mucho más leves que los de un gato que no está vacunado.
Finalmente, en caso de que la gripe se alargue más allá de los diez días, es conveniente que lleves a tu gatito a un centro veterinario para que pueda ser explorado con más detalle por un profesional. Y es que, aunque la gripe felina sea una enfermedad leve, hay que tener en cuenta que en algunos casos puede traer consigo algunas complicaciones, como una neumonía, anemia o la deshidratación de tu mascota.
