¿Qué es el síndrome del gato paracaidista?

Suena gracioso pero no lo es. El síndrome del gato paracaidista hace referencia a una patología que actualmente continúan estudiando veterinarios y expertos en comportamiento felino. Los gatos son animales ágiles, con un extraordinario sentido del equilibrio. Entonces, cuando se caen desde una altura considerable ¿se trata de un accidente? ¿Se tiran? ¿Han calculado mal?

Por supuesto un mal paso lo puede dar cualquiera, pero se habla de síndrome del gato volador cuando un felino “vuela” desde una altura considerable (seis - siete metros), sin motivo que lo justifique y haciendo más de una pirueta para intentar caer de la mejor manera posible.

A algunos gatos les gustan los lugares altos. Un pájaro que se acerque, un golpe de viento, un insecto, un ratón que corre por el suelo en el exterior… el gato lo sigue con la mirada y mueve sus patas hasta que pierde el equilibrio y tal vez acaba cayendo sin querer o ¿lo hace de forma premeditada?.

¿En qué consiste el síndrome del gato volador?

Se considera un síndrome cuando un mismo animal se ve envuelto en estas situaciones una y otra vez. El gato “vuela” arriesgándose a un buen golpe o a algo peor. Consiste precisamente en esa reacción inexplicable que hace que el felino, estando en estado de reposo, reaccione ante un estímulo y se precipite al vacío. Se da por igual en gatos machos y hembras y, normalmente, se trata de gatos bebés, más inexpertos, y mayoritariamente en felinos no esterilizados, más propensos a escaparse ya exponerse a situaciones de riesgo. Las lesiones en la cabeza en el tórax y en el abdomen son las más habituales entre los gatos que padecen este síndrome.

Hay que recordar que si detectas que tu gato tiene “tendencia” a saltar desde alturas peligrosas, debes tomar las necesarias medidas preventivas, evitando su acceso a ventanas u otros lugares de riesgo.