La toxoplasmosis de los gatos provoca en los felinos síntomas muy variados, desde diarreas, desnutrición y aletargamiento, hasta enfermedades renales o problemas oculares. ¿La toxoplasmosis en los gatos se cura? Por su puesto, pero siempre y cuando sea diagnosticada a tiempo y se aplique el tratamiento correcto que evite un excesivo deterioro del organismo del gato.
Hay que tener en cuenta que esta enfermedad tan común de los gatos está provocada por la presencia del parásito toxoplasma gondii. Si se detecta a tiempo y se minimizan los daños que éste pueda causar, el felino puede sufrir un episodio de toxoplasmosis, superarlo y continuar llevando una vida saludable.
El parásito se instala en su huésped favorito, el gato, y puede hacer que éste desarrolle síntomas de la enfermedad o no. En ocasiones, solo utiliza sus intestinos para reproducirse generando ooquistes (huevos) que saldrán al exterior en las heces. En cualquier caso, la presencia de este protozoo parasitario hará que el sistema inmunológico del gato cree sus propios anticuerpos de defensa. En ocasiones, un gato sin sintomatología grave, una vez expulsado el parásito, se puede recuperar a los pocos meses sin tratamiento alguno y además resultará inmune ante nuevos contagios.
Diagnóstico de toxoplasmosis en gatos
Por desgracia no siempre resulta tan sencillo. El parásito “ataca” órganos fundamentales para la salud del gato, además de debilitarle de manera generalizada. Ante la sospecha de toxoplasmosis, es imprescindible acudir al veterinario para que la enfermedad, si existe, quede diagnosticada y se inicie el correspondiente tratamiento.
Una exploración general, un análisis de sangre que busque parámetros específicos y, como complemento, un análisis de heces pueden determinar con exactitud la presencia de este parásito de los gatos o, quizá, solo la de esos los anticuerpos que han batallado para eliminarlo.
El tratamiento con antibióticos, unido a la ingesta de antiparasitarios, es válido en la mayoría de los casos para acabar con la enfermedad. El diagnóstico precoz es imprescindible para que estos tratamientos médicos resulten efectivos. Además, cada caso es diferente y el veterinario tendrá que determinar las medidas necesarias para recuperar el buen estado de los órganos afectados y la salud general del gato.
En la mayoría de los casos, la toxoplasmosis en gatos se supera y los felinos, quedan inmunes frente a un posible nuevo ataque del parásito que la causa.
