La ataxia es una enfermedad que afecta a los gatos y que puede tener orígenes diversos. En realidad, es un síntoma de una dolencia específica que se manifiesta en forma de descoordinación general y dificultad en el movimiento. Un gato con ataxia camina como si estuviese mareado, dando tumbos. La falta de coordinación hace que tu gato pierda el equilibrio al caminar y no sepa calcular correctamente las distancias.
La cura de la ataxia es muy compleja y en ocasiones, desgraciadamente, imposible. De todas maneras, siempre puede y debe tratarse para proporcionar al animal la mejor calidad de vida posible.
Diagnóstico de la ataxia en gatos
Si sospechas que tu gato puede ataxia, porque se cae o tropieza con frecuencia, camina con evidente descoordinación o hace movimientos extraños con su cabeza, debes llevar a tu gato al veterinario para diagnosticar si, efectivamente, estás ante un problema de ataxia. Ten en cuenta que los síntomas pueden confundirse con los de otras enfermedades de los gatos: debilidad general, anemia, dolores musculares o en articulaciones…
Análisis, radiografías y otras pruebas confirmarán la existencia de ataxia y podrán determinar de qué tipo se trata, ya que puede ser:
- Ataxia cerebelar. Difícil de curar porque está relacionada con una malformación o afección del cerebelo, parte del cerebro responsable del equilibrio.
- Ataxia vestibular. En este caso, el origen de la dolencia parte del oído interno. Si el gato la padece, no solo tendrá dificultad al andar sino también descoordinación en los movimientos de su cuello y cabeza. En ocasiones puede curarse totalmente, por ejemplo si la causa es una infección en el oído o un pequeño tumor que pueda operarse. En otras no es posible.
- Ataxia sensorial. Es complicada porque la provoca la falta de conexión entre las órdenes que envía el cerebro y la recepción por parte de los nervios periféricos. La causa puede estar también en una lesión de la médula espinal.
En cualquier caso, el veterinario te indicará las posibles soluciones o el mejor tratamiento para que tu gato pueda vivir controlando al máximo los síntomas de su ataxia.
