En el mercado existen distintos tipos de arena para gatos, cada una con sus propias características y con sus pros y contras en cuanto a higiene. Entonces... ¿cuál es la mejor arena para gatos? La arena ideal sería aquella que se mantuviese limpia por más tiempo, que tuviese un gran poder de absorción y propiedades aglomerantes y, lo más importante, aquella que a tu gato le pareciese perfecta.
Entre las más habituales tienes:
- Arena a base de sepiolita. Es la arena convencional, la más utilizada. La sepiolita es un mineral muy poroso por lo que absorbe bien y además es económica. El problema es que aunque recoge moderadamente bien los orines, no retiene el olor. Si tu gato está conforme, puede ser una buena elección siempre teniendo en cuenta que tendrás que cambiarla con frecuencia, cada 4 – 5 días máximo porque los olores pueden resultar muy desagradables.
- Arena con bentonita. Es similar a la anterior pero en este caso, a la sepiolita se le añade una arcilla llamada bentonita con propiedades aglomerantes que facilita la limpieza. Podrás retirar las heces sin tener que desperdiciar toda la arena.
- Arena de sílice. Destaca su calidad porque está hecha a base de perlas de gel de sílice ultra absorbente y capaz de neutralizar olores. Es la más cara pero teniendo en cuenta que te puede durar varias semanas, tendrás que echar números. Otra de sus ventajas es que al ser gel no levanta nada de polvo. Las perlas son transparente y, a medida que absorben los orines, se tornan amarillentas. Así, por el color, sabrás cuando toca renovarla. Todo ventajas pero hay gatos a los que este material sintético no les gusta en absoluto.
- Arena ecológica. Está hecha a base de fibras de madera no aptas para otro fin, por lo que es una buena ayuda para el medio ambiente y además, tu casa tendrá un agradable olor a madera. Estas arenas absorben muy bien y con ellas es fácil retirar los excrementos. Es algo más cara que las convencionales y como inconveniente, al ser virutas de madera, al gato pueden quedarle restos en sus patas y en el pelaje.
¿La mejor? Tendréis que decidirlo entre tu gato y tú.
